lunes, 1 de febrero de 2010

El prólogo eterno

Cuando la muerte es tu amiga, tu fiel compañera, la que nunca te abandona, la que siempre te rodea pero nunca te toca, puedes sentirte afortunada porque eres eterno, eres un espíritu eterno.


El dolor, el misterio y el amor se dan la mano en esta obra que busca y encuentra que pases un buen rato en la escritura, que seas consciente de que el amor lo puede casi todo y consigue que tú, lector, no muestres indiferencia ante los horrores de la guerra.

La autora mezcla con gran maestría los dolores de la guerra con el amor loco y profundo, las penas de la soledad con la intriga más eficaz, la sinceridad de una amiga con la crueldad de tu destino Esta mezcla de ingredientes consigue dar una profundidad y un atractivo a la obra que logra recuerdos eternos en tu memoria.

Con una protagonista con mucho arte que toca las notas al son del dolor, con un general nazi que intimida con su cuerpo y atrae a las fieras, con personajes históricos conocidos por todos y con un dragón libre que nos alza en pos de nuestros sueños, tenemos esta obra que cobra vida en las muchas personas que injustamente deben aceptar su destino.

Con un desarrollo rápido y un vocabulario culto la autora ha logrado que el libro merezca ser leído y que hay tenido un club de fans antes de ser publicado.

Si quieres conocer las aventuras de Marina llenas de intriga, misterio, amor y dolor te aconsejo que pases la página, sino quieres saber de Marina te invito que leas el libro para que te des cuenta de la maravillosa historia que te ibas a perder.